domingo, 21 de junio de 2015

Los padres únicamente nos convertimos en visitadores y proveedores de dinero


Coparentalidad es una organización de la sociedad civil que reúne a 45 divorciados, quienes luchan por seguir participando en la crianza de sus hijos. Denuncian que la legislación no los ampara.

Foto: John Guevara / EL Telégrafo
Foto: John Guevara / EL Telégrafo
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Redacción Sociedad
Hace 2 años que Richard Ponce no ve a sus 3 hijos. Posiblemente hoy tampoco lo haga. “No creo que fui un padre perfecto, tuve muchos errores como todos porque soy humano, pero nunca hubo maltratos. Los extraño mucho, recuerdo cuando hacíamos deberes juntos, salíamos al parque. Yo era un niño más con ellos”, rememora.
Richard se reúne cada 15 días con otros padres que sufren una situación similar a la suya. La organización no sexista Coparentalidad Ecuador - Primero Somos Padres, que está por constituirse como fundación, los recibe. Está conformada por 60 personas, entre abuelos, abuelas y madres, 45 de ellos son papás. Ahí reciben asesoría legal, cuentan sus casos e idean proyectos que busquen concienciar sobre la necesidad de que los hijos crezcan en un ambiente de paz, en donde no se rompan los vínculos afectivos y se promueva la responsabilidad compartida.
Hace 30 meses que Richard firmó el divorcio. Su pareja se volvió a casar, pero él no lo ha podido hacer porque su lucha está enfocada en rehacer el lazo con sus hijos. Estuvo un mes en prisión por no pagar 2 meses de pensión alimenticia, también perdió su empleo.
“Un día mi expareja me preguntó si quería ver a mis hijos, le dije que sí. Fui a la hora pactada. Estaba conversando con unos amigos hasta esperar a mis hijos, pero solo salió la mamá con la policía y me apresaron. Caí como un niño”, dice.
Richard reconoce que debía cancelar la pensión, pero también siente enojo porque su expareja lo aleja de sus hijos. “¿Cómo le voy a depositar si no sé nada de ellos”, se cuestiona.
Mario Ramos también se divorció y afirma que su vida dio un giro de 180 grados cuando su hija empezó a rechazarlo.  “Luego de las investigaciones de los peritos judiciales llegaron a la conclusión de que mi hija padecía del síndrome de alienación parental SAP (...) estaba siendo influenciada por la madre y familiares maternos”, revela.
Lleva 1 año y medio que no puede verla. “Pese a que mi hija padece del SAP, las autoridades y jueces no hacen nada por impedir este maltrato psicológico”, argumenta.
Santiago Villareal, director nacional de Coparentalidad Ecuador, explica que este tipo de casos son  comunes. “Como organización fomentamos el diálogo para que haya una mediación efectiva, también para que los padres y madres tengan claro el rol que cumplirán en la vida de sus hijos y depongan actitudes por el bienestar de ellos”, explica el profesional, quien tras su divorcio  lucha por permanecer el mayor tiempo con su hija.  
Cita los artículos 83 y 69 de la  Constitución del Ecuador que detallan que el cuidado de los hijos es una tarea compartida y que ambos, papá y mamá, están obligados a criarlos, incluso en casos de separación. “En ninguna parte dice el padre que pierda la custodia de sus hijos se convertirá únicamente en visitante y proveedor. Lo que pedimos es igualdad y una verdadera equidad”, sostiene Santiago.

Vacíos y trabas en la legislación

El abogado Miguel Laguna si bien reconoce que hay casos de irresponsabilidad de los padres con el cuidado de sus hijos, también coincide con la demanda que plantea Santiago. Dice que varios artículos en el Código de la Niñez y Adolescencia favorecen más a las madres.
Por ejemplo el artículo 129 de este Código provee la participación  de la madre y del padre en la alimentación del menor.
Este texto dice también que solo se fiscaliza al padre, pese a que existen muchos casos en los que la madre trabaja. “Se debería plantear una fiscalización. El Código no prevé eso, no hay un control del dinero que el padre deposita a favor del hijo. Los padres únicamente nos convertimos en visitadores y proveedores de dinero (...) El gasto de ese dinero solo queda en la buena fe de la madre ”, cuestiona.  
Laguna detalla que el respeto al régimen de visitas estipulado en el articulo 125 del Código tampoco se cumple. “La normativa dice que se puede dictar el apremio personal  (cárcel) para la madre que incumple una resolución de visitas, pero no se ejecuta. A los jueces les tiembla la mano, pero no sucede lo mismo cuando un padre debe 2 meses de pensión de alimentos. Inmediatamente dictan el apremio personal sin mucha investigación”, sostiene.
Existe una tabla específica que plantea el valor que se debe cancelar por pensiones alimenticias. Hay 3 niveles de acuerdo al sueldo del progenitor. Laguna explica que cuando un abogado asiste a las audiencias, regularmente ofrece pagar el 50% de la deuda y el resto prorratearlo a 12 meses, pero en ello también hay reparos. “Lo que sucede es que el juez ordena pagar todo cuando hay una resolución de la Corte de Justicia que acepta la forma de pago prorrateada”, dice.
Para evitar todo este calvario, Santiago cree que las acciones preventivas son indispensables. Como vocero de la organización cree que antes de que una pareja vaya a mediación, la primera instancia debería ser una orientación y charla a los progenitores donde se hable de temas de alienación y manipulación parental y de los futuros problemas que esto genera en el menor. “De esta  manera se puede evitar el litigio”, dice muy convencido.  
El caso de Wilson Brito, miembro también de Coparentalidad, brinda esperanza a todos los padres de la organización porque pese a que está en proceso de divorcio, él y su expareja han logrado mantener una relación de amistad pensando en el bienestar de sus hijas. “Ambos depusimos actitudes negativas y ahora las cosas están más relajadas. Hemos limado asperezas (...) Tengo visitas sin limitación y puedo estar presente en la vida de mis hijas”.

Daño psicológico a futuro          

La psicóloga Yadira Medina destaca la importancia de fortalecer los lazos afectivos. “Si cortamos el vínculo con el padre solamente porque nuestra relación con él no ha sido satisfactoria, consciente o inconscientemente estamos utilizando a nuestros hijos como objetos de venganza. Esto puede generar inestabilidad emocional y conducirlos a afrontar situaciones más complicadas con el tiempo”, apunta.
La experta explica que antes se enfocaba a la madre como la figura más importante en la vida del niño, pero hoy  sobresalen estudios en los que se destaca el papel fundamental del padre. “Cuando crecen con una figura paterna, los  niños son más estables, independientemente de si sus padres viven juntos o separados.
El padre puede generar al involucrarse en la crianza de sus hijos el afecto, la confianza y la contención emocional que ellos necesitan para crecer felices”, puntualiza. (I)

Pocas empresas dan más días de licencias a padres

El artículo 152 del Código de Trabajo otorga 10 días de licencia por paternidad cuando el parto ha sido normal y 5 días más cuando el parto ha sido por cesárea.
En el Día del Padre, el portal de empleos Multitrabajos.com realizó una encuesta sobre paternidad y beneficios a más de 100 gerentes de recursos humanos de importantes empresas.
La mayoría de gerentes consultados aseguró que no otorgaría más días de paternidad (ver infografía).
El 68% de los encuestados aceptó que en su empresa no brindan beneficios especiales para los padres, como horarios flexibles, guardería o jardín de infante, entre otros servicios que les servirían de gran ayuda. (I)

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